El proceso de producción de tubos de acero soldados implica formar láminas o tiras de acero en la forma de la sección transversal deseada usando rodillos de presión rectos o métodos helicoidales, y luego soldarlas usando calor, presión u otros métodos. Como resultado, los defectos en las tuberías de acero soldadas se pueden clasificar en dos tipos principales: defectos del material base y defectos de soldadura.
1. Defectos del material base
Los defectos del material base se originan en la lámina o tira de acero utilizada en la producción. Estos defectos suelen ser planos y paralelos a la superficie. Los defectos más comunes del material base incluyen:
- Delaminación: Defectos internos estratificados que pueden provocar diversas grietas cuando se someten a esfuerzos de tracción perpendiculares a la superficie, afectando gravemente a la resistencia del tubo de acero.
- Inclusiones: Materiales no metálicos atrapados dentro del acero, comprometiendo su integridad estructural.
- Grietas: Fracturas dentro del acero que pueden propagarse y debilitar la tubería.
- Pliegues: Material superpuesto que puede crear puntos débiles.
2. Defectos de soldadura
Los defectos de soldadura ocurren durante o después del proceso de soldadura y pueden afectar significativamente la calidad y seguridad de la tubería de acero. Estos defectos incluyen:
- Grietas: Fracturas en la soldadura que pueden comprometer la integridad de la tubería.
- Poros: Pequeñas cavidades dentro de la soldadura provocadas por gas atrapado.
- Inclusiones de escoria: Material sólido no metálico atrapado en la soldadura.
- Penetración Incompleta: Cuando el metal de soldadura no penetra completamente el espesor de la junta.
- Fusión Incompleta: Cuando el metal de soldadura no logra fusionarse adecuadamente con el metal base.
- Socavado: Una ranura fundida en el metal base adyacente a la soldadura, reduciendo el espesor de la tubería.
Los defectos de soldadura como porosidad, inclusiones de escoria, grietas, falta de fusión y penetración incompleta pueden afectar significativamente la resistencia, plasticidad y calidad general de la tubería de acero. Estos defectos pueden afectar directamente la operación segura y la vida útil de las tuberías, especialmente en aplicaciones críticas como el transporte de petróleo y gas. Por lo tanto, la inspección y detección minuciosas de estos peligrosos defectos son cruciales para garantizar la calidad y seguridad de las tuberías de acero soldadas.